Los músculos y las articulaciones son dos partes importantes del cuerpo humano que trabajan juntas para permitirnos realizar una variedad de movimientos. Los músculos son un tejido conectivo que se contrae para producir movimiento. Están compuestos por fibras musculares, que se contraen y se relajan para producir movimiento. Los músculos se encuentran en todas partes del cuerpo, desde los músculos faciales hasta los músculos de los brazos y las piernas. Las articulaciones son las uniones entre los huesos. Estas permiten que los huesos se muevan entre sí, lo que permite que los músculos se contraigan y relajen para producir movimiento. Las articulaciones también ayudan a absorber el impacto de los movimientos, lo que ayuda a prevenir lesiones. Las articulaciones están compuestas por cartílago, ligamentos y tendones, que ayudan a mantener los huesos unidos y permiten que los músculos se contraigan y relajen para producir movimiento. Los músculos y las articulaciones trabajan juntos para permitirnos realizar una variedad de movimientos, desde caminar hasta levantar objetos pesados. Estas partes del cuerpo también ayudan a mantener la postura y a prevenir lesiones.